Poco más puedo añadirle a las palabras que ya dije en la sesión de preboda de Sandra y Santos.
Orgullosa de ser sus amigos, de darme esa primera vez de acudir a una boda como fotógrafa y como invitada.
Emotividad, sentimiento el que muestra esta gran pareja y esta gran familia.
El gran cariño que Sandra tiene hacia su hermana se palpó en el ambiente cuando tuvo que
ponerse a leer en la ceremonia y tan siquiera pudo empezar entre risas, complicidad y llanto.
Sandra siempre detallista, muy sensible y empática, pendiente de todo el mundo y generosa con todos.
Bonito día el que escogió para celebrar su boda… el mismo que celebraban sus padres el 33 aniversario de la suya. Precioso.
Santos… un chico con un corazón y saber estar enorme. Siempre con unos ojos y una sonrisa sincera y feliz.
Está claro que son una gran pareja.
Una gran pareja con la que he compartido parte de su vida en común.
Una pareja que merece todo lo mejor, por su gran interior y su gran exterior.
Honestos, vitales, transmisores de paz y alegría, con una gran preocupación y
ayuda en todo lo que les sea posible por los demás.
Agradecidos al más no poder.
Seguid así mínimo unos 13 años más y que sigamos compartiéndolo.
¡Gracias!
Qué suerte de nuevo poder juntarnos en el lugar que estudiamos su restauración las dos,
más simbólico el día aún: precioso el Monasterio de Carracedo.
Me encanta!!! enhorabuena Noemie, lo tiene todo, sentimiento, detalles, buenísima luz…
Muchas Gracias Noe, por cada palabra, pero sobre todo, por el cariño que has puesto en cada foto, por un trabajo titánico de un lado para otro, cuidando cada detalle y poniéndole tantas ganas a pesar del cansancio. No podíamos haber elegido mejor ojo para poner detrás de la cámara que iba a inmortalizar uno de los días más felices de nuestra vida, ya que no solo nos has cuidado a nosotros como novios, sino a cada uno de nuestros invitados. Sabes que te queremos un montón, y de nuevo, de todo corazón, Gracias.